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Electrodomésticos Silenciosos

Cómo ubicar y usar un ventilador de manera eficiente

El ventilador es uno de los electrodomésticos más prácticos para mejorar el clima de la casa sin la necesidad de utilizar un aire acondicionado. Es un aparato compacto, versátil, económico y que puedes colocar prácticamente en cualquier lugar. Ahora bien, ¿sabes realmente cómo usar un ventilador?

Para darle un uso efectivo a un ventilador no basta con solamente encenderlo y ponerlo a esparcir aire por toda la estancia. En realidad, hay ciertos trucos y secretos que te permitirán sacarle el máximo partido y hacer que tu entorno sea mucho más agradable.

¿Quieres conocer otros modelos de ventiladores pequeños y ultra silencioso?

¿Cuál es la forma correcta de situar un ventilador?

Lo que determinará la eficacia del ventilador es la colocación, porque en función de dónde pongas el aparato podrá hacer mejor o peor su trabajo. Si quieres obtener el mejor rendimiento, aquí tienes algunas recomendaciones que te harán disfrutar del ventilador como nunca antes:

Facilita una salida de aire

Ten en cuenta que lo que hace el ventilador es empujar el aire que ya existe en el entorno, así que si dicho aire es caliente, el ventilador no podrá refrescar nada. Por lo tanto, lo primero que debes hacer es abrir una puerta o una ventana y colocar el ventilador dándole “la espalda”.

De esta manera consigues que entre un poco de aire fresco a la estancia y el ventilador se ocupará de esparcirlo por la sala o la habitación. Por supuesto, esto sólo sirve cuando el aire del exterior es más frío que dentro de la casa, porque de lo contrario seguiría habiendo calor.

Úsalo en conjunto con el aire acondicionado

Es verdad que una de las razones para utilizar un ventilador es no tener que encender el aire acondicionado. Aun así, hay circunstancias donde la combinación de los dos elementos es lo más recomendable. Por ejemplo, un ventilador sirve para hacer que el aire acondicionado enfríe más rápido y con menos esfuerzo.

Para lograrlo, pon el ventilador en un ángulo de 45 grados de manera que mire hacia el centro de la habitación. También lo puedes colocar a lo largo de una esquina, siempre y cuando sea de la misma pared en la que has instalado el aire acondicionado.

Todo esto aumenta la eficiencia energética y fortalece la circulación del aire. Posteriormente, puedes apagar el aire acondicionado, dejar solo el ventilador y la estancia se mantendrá fresca por mucho más tiempo.

No sólo para enfriar

Algo bastante interesante de los ventiladores es que no sirven solamente para refrescar la estancia y hacerla un tanto más fría. Como hemos dicho antes, un ventilador empuja el aire que ya existe en el entorno, así que si ese aire es caliente, también se puede utilizar como un sistema de calefacción.

Si usas un calentador o un aire acondicionado caliente, puedes valerte del mismo método anterior. Es decir, pon el ventilador a unos 45 grados, mirando hacia el centro de la habitación, y en la misma pared del sistema de calefacción. Esto permite que el aire caliente circule mucho mejor por la habitación y que el clima sea más acogedor.

¿Cuánto tiempo se puede dejar encendido un ventilador?

Durante el día, puedes dejar encendido el ventilador el tiempo que te haga falta, siempre y cuando eso no perjudique tu factura de la luz. Estos electrodomésticos han sido diseñados para funcionar de modo constante y por largo periodo de tiempo.

Ahora bien, cuando vas a dormir debes poner un poco más de cuidado, porque la temperatura del aire va disminuyendo conforme va entrando la madrugada así como tu temperatura corporal. Por lo tanto, si dejas el ventilador encendido toda la noche, quizá sientas algo de frío y pueda causarte algún resfriado.

Lo más conveniente en estas circunstancias es hacerse con un ventilador que disponga de temporizador. De este modo puedes configurar las horas de funcionamiento del aparato para que esté encendido durante las primeras horas de la noche, pero que se apague solo con el paso del tiempo.